LA BODA

Que linda estaba mi hermana,
Con su traje blanco marfil
Caminando en la iglesia
Al encuentro de su unión,
Tomadita de la mano,
De un orgulloso padre,
Que al entregarla a su novio,
Sentimientos se agolparon,
Y por sus ojos brotaron.
Ella estaba radiante,
Su felicidad se notaba
Al mirar al feliz novio,
Sus ojitos le brillaban.
El, caballero elegante,
De buen porte y buen talante,
A la pregunta del cura,
Demostrando gran soltura,
Respondió con certeza,
No solo dijo, acepto!!!
Si no, también lo prometo…
Muy felices se miraron,
Al proclamarlos esposos,
Sus familias se alegraron,
Por ver esta bella unión,
Realizada en bendición,
Con sacramento divino…
De la mano muy felices,
Salieron los nuevos esposos,
Para emprender un futuro
Enmarcado en el amor…
De muchas partes llegaron
los amigos a su encuentro,
Para poder apreciar,
El comienzo de este cuento